Los micropilotes, elementos empleados para reforzar las construcciones haciendo que ganen en seguridad, se integran en una estructura de acero que, insertada en una armadura, constituye un núcleo recubierto por cemento de alta resistencia para garantizar la firmeza en su instalación.
Desde Sondeos Verderol, servicios de perforaciones en Nigrán, Vigo y Pontevedra, hemos preparado para usted una breve guía sobre cuáles son las construcciones que se pueden beneficiar de las ventajas de los micropilotes.
Para qué se emplean los micropilotes y en qué tipo de construcciones
Su objetivo es el refuerzo y la seguridad en el edificio. Y son varios los tipos de proyectos constructivos que pueden disfrutar de sus ventajas.
Cuando un edificio experimenta una ampliación, los micropilotes resultan de gran utilidad para sostener y reforzar las nuevas cimentaciones. También cuando se ejecutan cimentaciones de gran profundidad en zonas que cuentan con dimensiones reducidas o bien que resultan de difícil acceso.
Los micropilotes también son empleados en la perforación de sótanos y en nuevas cimentaciones. Cuando existen estructuras colindantes, el empleo de micropilotes ayuda a evitar impactos fuertes, vibraciones y otros fenómenos que puedan afectar los elementos aledaños.
Cómo se construyen los micropilotes
Lo primero es realizar un profundo agujero de pequeño diámetro sobre el que se insertará la micropilotadora en terreno.
Una vez realizada la perforación, se aplica el material de relleno para el hueco, asegurando la estructura del micropilote. Posteriormente, se crea un soporte en su parte superior de manera tal que se refuerza su contacto con la base.
Los micropilotes pueden resistir cargas de trabajo de hasta 200 toneladas y su perforación se puede extender hasta los 60 metros de profundidad. Las características del suelo, el tipo de maquinaria de perforación empleada y la carga que deben soportar son los factores que determinarán su tamaño final.
Qué ventajas tiene el empleo de micropilotes
Son rápidos de instalar, tan solo se requiere un paso, lo que supone un gran avance en el proceso constructivo: con relación a los beneficios que reportan, los micropilotes resultan muy fácilmente instalables.
Solo son necesarios pequeños equipos para llevar a cabo este tipo de trabajos, por lo que el coste de los micropilotes no resulta muy elevado. Consiguen adaptarse a todo tipo de terreno, por lo que la versatilidad es una de sus grandes ventajas.
Y, como ya hemos referido, una vez instalados, los micropilotes reducen los ruidos, las vibraciones y los impactos de manera muy superior a los pilotes convencionales, al tiempo que trabajan con una gran carga compresiva, lateral o de tracción.
Resultan eficaces en proximidad a otras construcciones o incluso cuando el espacio disponible es muy limitado. Un elemento todoterreno pensado para la seguridad en tu edificio.